La pandemia le ha dado al sector en la línea de flotación. Le ha dado donde más duele, porque nosotros hemos sido los primeros en caer y los últimos en volver. Más allá de todo eso, yo soy de la opinión de que no podemos estar continuamente lamentándonos por la situación.
Estamos haciendo cosas que se salen de nuestra misión, los grandes festivales. El negocio digital se ha disparado en confinamiento, y esta unidad de negocio no ha parado de crecer.
Las marcas que han permitido una adaptación por formato, como pueden ser el Granada Sound o Les Arts, han continuado con las restricciones oportunas desde mayo. Ha habido ciudades donde el aforo nos ha permitido 1.500 personas, como pasa en Andalucía, y 400 personas, en el caso de Comunidad Valenciana. Nos hemos reinventado.
A pesar de la situación, hemos sido la productora que más conciertos ha celebrado (345 shows) y seguimos trabajando para diciembre. Todo gracias a la formación continua al equipo y a la redirección hacia estas unidades donde podemos trabajar.