Emprender es muy intenso. Muchas veces tienes la sensación de estar en la cresta de la ola y otras veces en el fondo de un pozo. Y puede que solo hayan pasado unos minutos de un momento a otro.
Una vez estaba en un evento de startups en Madrid y me entrevistaron en directo para Espejo Público. ¡Desde el plató me hacía preguntas ni más ni menos que Susanna Griso!
Y yo estaba súper emocionado, con mi camiseta de mi startup puesta para que toda la audiencia la viese (en aquel momento aún nos llamábamos Regalamos.es) y así atraer el mayor tráfico posible a nuestra web.
Cuando acabé la entrevista enseguida llamé a mi CTO y le pregunté cómo había sido el pico de visitas, cuántos miles de usuarios nuevos teníamos, cuánto dinero se había recaudado en la plataforma a raíz de salir en la televisión nacional en directo.
Mi CTO me contestó muy serio: “El servidor no ha escalado bien y la web se ha caído a los pocos segundos”. Nunca lo olvidaré. De estar en el cielo a pasar al infierno casi de manera instantánea.
Algo también curioso y que nunca me hubiese imaginado es que, a raíz de la ronda de inversión que hicimos, entró como socio el Grupo Zeta (propietarios de revistas como Woman, Cuore, Interview…) y acabamos escribiendo una sección en la revista Cuore durante varios meses para atraer usuarios a Splitfy.
Una revista que siempre había visto leer a mis hermanas en la playa en verano y que nunca había entendido. Si unos años atrás me dicen que acabaría escribiendo una sección en la revista Cuore me hubiese reído un buen rato.